King Kazma
Shiromimi
15-10-2024, 09:49 PM
¿Cómo era posible que Jack fuera tan rápido como para reaccionar a un golpe tan veloz? Había llegado a él en una fracción de segundo y aun así se las había arreglado para mitigar buena parte del daño. No sabía por qué Jack había decidido retarle en ese momento. ¿Para ser el capitán? Eso lo podría haber hecho cuando quisiera, no le necesitaba a él para iniciar una tripulación y luego hacerse con el mando. Si simplemente quería probar lo fuerte que era, lo estaba llevando demasiado lejos, en especial con sus declaraciones. ¿Qué lo mataría? ¿Qué necesidad había de ello? Si entrenaba era precisamente porque era consciente de su propia debilidad.
El siguiente ataque no lo vio venir. Apenas fue capaz de poner los brazos por delante, todavía cubiertos con Busou antes de sentir un dolor lacerante en ellos y salir empujado hacia atrás, cayendo de espaldas y rodando un par de veces. Las heridas de antes eran apenas un rasguño, pero las de ahora… Sangraban mucho, podía ver el hueso a través de la misma. Se incorporó, tratando de hacer presión en las heridas usando sus manos. Al ser en los antebrazos podía hacerlo cruzándolos, pero igualmente seguía goteando sangre entre sus dedos. Luego le tocaría lavarse el pelaje… y quitar sangre no era precisamente tarea fácil. – Ya has tenido tu diversión. Si quieres largarte o ser el capitán adelante. Pero para serlo necesitas su respeto, y dudo mucho que vayan a poner sus vidas en manos de un borracho mujeriego. – Y mucho menos si amenazaba de muerte a la gente que se suponía que eran sus amigos. – Voy con Alexander a que arregle este desastre. – Antes de que se quedara sin sangre que perder. Esperaba realmente encontrarse al lobo en la posada, porque no tenían buena pinta para nada esos cortes.
El siguiente ataque no lo vio venir. Apenas fue capaz de poner los brazos por delante, todavía cubiertos con Busou antes de sentir un dolor lacerante en ellos y salir empujado hacia atrás, cayendo de espaldas y rodando un par de veces. Las heridas de antes eran apenas un rasguño, pero las de ahora… Sangraban mucho, podía ver el hueso a través de la misma. Se incorporó, tratando de hacer presión en las heridas usando sus manos. Al ser en los antebrazos podía hacerlo cruzándolos, pero igualmente seguía goteando sangre entre sus dedos. Luego le tocaría lavarse el pelaje… y quitar sangre no era precisamente tarea fácil. – Ya has tenido tu diversión. Si quieres largarte o ser el capitán adelante. Pero para serlo necesitas su respeto, y dudo mucho que vayan a poner sus vidas en manos de un borracho mujeriego. – Y mucho menos si amenazaba de muerte a la gente que se suponía que eran sus amigos. – Voy con Alexander a que arregle este desastre. – Antes de que se quedara sin sangre que perder. Esperaba realmente encontrarse al lobo en la posada, porque no tenían buena pinta para nada esos cortes.