Alguien dijo una vez...
Rizzo, el Bardo
No es que cante mal, es que no saben escuchar.
Pirateando [Aventura - Tier 2]
Ray
Kuroi Ya
Los movimientos de Gretta desconciertan a los dos marines que tiene agarrados, que ya empiezan a notar cómo el aire escasea en sus pulmones. Presas del pánico al sentir que están cerca de perder el conocimiento y quedar a merced de la terrorífica jabalí, intentan golpearla con sus espadas en repetidas ocasiones. Sin embargo entre la fuerza con la que la daimink les desplaza, cambiando continuamente de dirección, y la resistencia interpuesta por el agua, las espadas de ambos se escapan de sus manos. Desesperados, le golpean cada uno en dos ocasiones con los puños en un último intento de liberarse de su tenaz presa.

En cuanto al marine restante, observa con una profunda ira cómo sus compañeros son arrastrados bajo el agua y usados a modo de escudo para evitar que se acerque. Trata de agarrar el brazo derecho de la enorme pirata para intentar liberarles, pero el agua lo dificulta y no lo consigue, ya que no se lanza con todas sus fuerzas a ello por miedo a ser arrastrado también en el intento.

- Maldita cerda gigante... - Masculla, sintiendo una profunda impotencia al no poder hacer nada para ayudar a sus compañeros.

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Por otro lado el oficial de la Marina parece estar en un apuro, pues se encuentra en desventaja numérica frente a Shiro y Qazan. El espadachín y el gyojin atacan con fuerza y coordinación desde dos ángulos distintos, por lo que no dispone de demasiadas opciones. Su ceño se frunce y los dos piratas pueden ver cómo coge su escudo con ambas manos mientras hace una leve inclinación de todo su cuerpo hacia su derecha para, acto seguido, comenzar a girar sobre sí mismo a una increíble velocidad, como si de una peonza se tratara. Gracias a esto choca con vuestras ofensivas, no siendo no obstante capaz de competir contra ambas al mismo tiempo.

Tras el impacto entre los tres ataques el marine hinca momentáneamente su rodilla derecha. Parece claramente cansado, viéndose en serias dificultades para enfrentar al mismo tiempo a los dos piratas. En ese momento solo pudo pensar en la mala suerte que suponía que la mayoría de sus hombres no estuvieran en condiciones de combatir tras las heridas sufridas durante la batalla que habían mantenido unos días atrás contra los Piratas de Hargreaves. Tan solo tres de sus subordinados habían podido unírsele en esta ocasión, atacando a la enorme jabalí que había volcado su embarcación. No podía rendirse. Se lo debía a los que no podían luchar en esos momentos. Así que, sacando fuerzas de flaqueza, se dispuso a acometer de nuevo a sus enemigos.

Se lanzó contra el habitante del mar, que era el más cercano, y amagó con lanzarle un puñetazo hacia el estómago con su mano libre para, sin darle tiempo ni de reaccionar, tratar de golpear su cuello con todas sus fuerzas con el canto de su escudo buscando dejarle sin respiración. Acto seguido saltó y agarró su escudo con ambas manos para intentar asestar un poderoso golpe descendente en la cabeza al pirata aprovechando el desconcierto que sin duda le habría generado su primera ofensiva.

Cosas
#41
Qazan
Qazan
Con un ágil movimiento giratorio, el marine de alto rango consiguió amortiguar y repeler gran parte de los ataques que le habíamos lanzado entre el peliblanco y yo. Aquella manera de girar con su escudo recordaba a un remolino en miniatura de los que a veces me encontraba nadando bajo el agua, qué gran manera de repeler un ataque que viene de varias direcciones, esa idea me la apuntaba para reproducirla en el futuro ya fuese se una manera o de otra.

El capitán no tuvo más remedio que acabar hincando la rodilla luego de la combinación letal que le habíamos lanzado entre Shiro y yo. Jadeante parecía estar maldiciéndonos por haber destrozado su escuadrón. Sacando fuerzas de flaqueza parecía querer lanzar una última ofensiva, me encontraba justo delante suya así que su objetivo sería yo casi con toda seguridad. Debía ser rápido y aprovechar la distancia que nos separaba para preparar mi defensa, de otro modo seguramente lo fuese a pasar mal. No hay nada más peligroso que un hombre que no tiene nada que perder, éste marine tenía claro que no íbamos a tener ninguna piedad con él así que trató al menos de causarnos la mayor cantidad de dolor que fuese capaz de infligir con las pocas energías que le quedaban.

Rápidamente al ver sus ojos envueltos en cólera e ira y antes de que se lanzase contra mí, levanté mis puños al tiempo que agachaba mi cuerpo dispuesto a encajar y recibir la ofensiva del Capitán. - Esto va a ser duro-. Dije mientras me pertrechaba y esperaba su brutal acometida con la idea de que, mientras me atacaba a mi, Shiro hiciese de las suyas. El ataque no se hizo esperar demasiado, trató de golpearme la garganta con el escudo pero al estar defendiéndome me golpeó en los antebrazos. Sin duda no era un marine más del montón, había recibido buena instrucción militar y además, atacaba con mala leche. El golpe era doloroso aunque no lo suficiente para hacerme bajar los brazos.

Seguido, lanzó un segundo ataque intentando golpearme desde una posición más elevada tras un salto con el escudo. Menos mal que no había bajado la guardia luego del primer golpe, éste segundo venía directo a golpearme en la cabeza y eso si que podía haberme puesto en serios aprietos. -Golpeas duro Marine, gracias por esta gran experiencia... ¡¡Ve Shiro!!-. Grité mientras poco a poco bajaba los brazos luego de aquella acometida, me había dejado los brazos muy doloridos y entumecidos. Necesitaría unos segundos para recuperar la movilidad de estos. Sin duda aquel marine era peligroso.

Datos
#42
Gretta
La Devoramundos
Gretta giraba y giraba; el agua se arremolinaba a su alrededor; al principio no le costó mucho arrancar; si no hubiese sido por su fuerza, arrastrar la suma de su cuerpo y el de los dos hombres adultos que ahora giraban como unas hélices de un barco, junto con toda esa masa de agua, habría sido difícil, pero ahora la improvisada turbina de carne estaba en marcha. Ella simplemente giraba sobre sí misma, agitando los brazos de vez en cuando, como si fuese una atracción de feria. Entre vuelta y vuelta, Gretta pudo ver cómo el marine, que aún quedaba libre, no se atrevía a entrar en el círculo que hacían sus dos compañeros.

Los dos marines hacían lo imposible por soltarse. "¿Cuánto puede aguantar la respiración esta gente? A ver si van a ser nadadores de estos profesionales que cruzan islas, ¡ay mi madre! Que no lo sean, por dios, que yo no aguanto aquí mucho más tiempo dando vueltas, me pego la vomitada padre, ya verás… Por lo menos parece que ha funcionado, porque no ha habido más cortes, solo unos vagos golpes con sus manitas… Vais apañados para soltaros."—OUNGH, OUNGH— Se rio Gretta y al momento le dio una arcada. "Espero que se queden sin aire pronto, porque estoy empezando a marearme… Cierra los ojos, ¡coño!" Pensaba Gretta mientras seguía con su técnica improvisada.

—Maldita cerda gigante… Escuchó Gretta mientras giraba y mantenía los ojos cerrados. "¿Cerda? ¿Cerda? ¿Ha dicho cerda?"

—Idiota, ¡soy jabalí!— exclamó Gretta frenando en seco su movimiento. —Miriame bien, porque voy enseniarte diferensia, antis de que muerras eh.

Acto seguido, Gretta con un aura oscura de odio, se quedó mirando de frente al marine. Pegó un tirón hacia ella de los dos marines que tenía aún agarrados, colocándolos a su espalda. —¿Quierres amigios?, adelante cogilos— Gretta propulsó sus brazos hacia delante con violencia, los cuerpos que fueron arrastrados y portados como látigos o porras, salieron del agua a gran velocidad, con la intención de realizar dos ataques contra el otro marine.

Cosas y Números
#43
Shiro
Ninguno
La pareja compuesta por el espadachín y el gyojin realizaron su ofensiva a la perfección, cubriendo ambos flancos en busca de alcanzar al marine de forma letal. Shiro estaba convencido de que con un ataque en conjunto no podría defenderse de los dos a la vez con el pequeño escudo que llevaba, pero para sorpresa del peliblanco, este realizó una técnica defensiva giratoria con la que pudo bloquear parte de los mismos. Había sido un movimiento poderoso, aunque no lo suficiente.

Shiro, tras su ataque, tomó algo de distancia, manteniendo sus armas en una posición defensiva mientras vigilaba que el tipo no contraatacase. El espadachín ya había probado en sus carnes la fuerza del marine con cara de simio y no quería volver a recibir un golpe así. El joven estaba seguro que una vez se le pasase la adrenalina generada por el momento tras aquella pelea iba a dolerle hasta el alma… aunque para eso primero tenían que sobrevivir.

- Empate, cabronazo - pensó el peliblanco al ver como el marine tenía que hacer acopio de fuerzas para recobrar la compostura. Qazan tenía razón y si la pareja jugaba bien sus cartas podían ganar aquella pelea.

El peliblanco comenzó a moverse, realizando un semicírculo, buscando el poder rodearlo y así atacar nuevamente desde dos flancos distintos, pero antes de que pudiese terminar su maniobra, el marine se lanzó a toda velocidad contra Qazan. A Shiro le sorprendió aquel repentino movimiento, no porque estuviese distraído o algo parecido, sino porque esperaba ser el blanco del marine otra vez. El peliblanco era mucho más pequeño y ya estaba herido, por lo que lo más lógico hubiese sido que el objetivo fuese él… pero no. Ya fuese un acto de valentía o de inconsciencia, el soldado fue directo a por el gyojin, dejando a Shiro en su retaguardia.

El espadachín, sin pensarlo dos veces, se lanzó tras él mientras enfundaba una de sus armas. No en un acto de inconsciencia como el del marine, sino viendo una oportunidad perfecta para acabar con todo esto de una vez. El hombre era más rápido que Shiro, por lo que el muchacho no tuvo tiempo a llegar antes de que este lanzara su primera ofensiva a Qazan. El peliblanco confiaba en las habilidades de su nakama para resistir aquel golpe, así que se centró en su propio movimiento, dejando a un lado cualquier preocupación. Primero tenían que ganar y luego ya tendrían tiempo para lamerse las heridas.

El marine saltó, buscando descargar un segundo golpe a Qazan, y Shiro lo acompañó un instante después, buscando el momento en que el marine impactaba con su escudo sobre la orca para abalanzarse a sus espaldas. No buscando apuñalar la zona desprotegida, sino con una clara intención de subirse a sus espaldas y activar sus poderes, confiando en que no fuese lo suficiente poderoso como para resistirse. El peliblanco había estado entrenando su habilidad con su fruta del diablo desde que la había consumido y confiaba que tanto esfuerzo se viese al fin recompensado. Era el momento de la verdad.

Si el joven conseguía realizar su maniobra y el marine caía sobre su control, todo habría acabado. El peliblanco se acomodaría bien sobre él, sujetándose fuertemente con las piernas, mientras se giraba hacia su compañero con una sonrisa triunfal. Tras eso, Shiro le dedicaría unas palabras tranquilizadoras a Qazan, explicándole que el marine estaría bajo su control durante un rato y que fueran a ver como se encontraba Gretta. Shiro en realidad no estaba preocupado por su seguridad… sino más bien temía que si la dejaban sola mucho rato terminara comiéndoselos a todos.

Por otro lado, si el peliblanco no conseguía controlar al marine porque este lo evitase de alguna manera, intentaría mantenerse a un par de metros de él, buscando tenerlo lo más acorralado posible entre su espada y el enorme gyojin.

Resumen y cosas
#44
Ray
Kuroi Ya
Gretta, poco a poco notas como los dos marines dejan de resistirse a tu agarre y de intentar golpearte para liberarse. Da la sensación de que la imposibilidad para respirar bajo el agua ha hecho mella en ellos y están inconscientes. El enemigo restante, incapaz de moverse con la suficiente velocidad y con una expresión en su rostro mezcla de sorpresa, rabia y asco hacia tu persona es golpeado por los cuerpos inconscientes de sus dos compañeros, utilizados como mazas por ti.

No obstante, tras recibir el ataque no tarda demasiado en reponerse y tratar, en un momento desesperado, de lanzar una última ofensiva para intentar acabar contigo antes de terminar como sus dos compañeros. Se impulsa hacia ti a tanta velocidad como es capaz de alcanzar con su espada por delante, tratando de ensartarte con la misma, mientras grita con rabia. Da la sensación de que es consciente de que no tiene mucho que hacer contra ti en solitario, pero eso no quiere decir que vaya a rendirse fácilmente.

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Por otro lado el oficial intenta acabar con Qazan, pero para su sorpresa este recibe sus dos ataques y, aunque es evidente que le han causado daños estos no parecen ni mucho menos tan importantes como el militar había calculado. Y para colmo la pequeña distracción que supuso esa ofensiva fue más que suficiente para que Shiro le pillase desprevenido y no fuera capaz de defenderse de él.

- ¿Qué es esto? ¡Quítate de encima mío! - Exigió una fracción de segundo antes de perder el control sobre sus propias acciones. Le gustara o no, eso era irrelevante. Había quedado completamente bajo el control del pirata, siendo su voluntad completamente anulada al menos durante un tiempo.

Una vez Shiro ha conseguido montar al oficial marine y ganar el control total sobre sus acciones acudís a donde se encuentra Gretta. Allí el marine raso que queda luchando contra ella sonríe al ver a su superior y le pide que le ayude a acabar con la enorme daimink jabalí. Sin embargo su sonrisa se torna en una mueca de desconcierto cuando ve aparecer al lado del oficial al enorme gyojin orca, actuando ambos como si no fuesen enemigos.

- Qué... ¿Qué está pasando? - Pregunta, sin entender nada.

Cosas
#45
Gretta
La Devoramundos
Gretta atacó con los dos marines como porras, mientras se reía desquiciada. —OUNGH OUNGH OUNGH, Ahora que eh, ¿no quierres choquiar armas? OUNGH OUNGH OUNGh— Dijo ella, mientras estampaba las dos armas improvisadas contra el marine. Este recibió el golpe y pareció enfadarse más, por lo cual agarró su espada fuerte y se dirigió hacia ella de manera hostil otra vez. Gretta ante esta nueva afrenta, no pudo evitar pensar "Qué valiente es, eso hay que reconocérselo, que pena que el cementerio esté lleno de valientes...".

"Estos otros ya no responden, eh, creo que ya están más que inconscientes". Ella, al notar que los cuerpos de los marines no reaccionaban ya, los soltó. Entonces, viendo venir el ataque gracias a la poca soltura que tenía en el agua aquel marine solitario, pudo prepararse medianamente para una defensa. Flexionó rodillas, retrocedió los brazos y los tensó bien, aguardando el momento oportuno; aguantó lo justo, y cuando el marine, lanzó la estocada, ella le metió un palmetazo directo al pecho con ambas manos, haciendo que este fallase el golpe y acabase propulsado hacia atrás por el agua varios metros.

Palma de Acero
VAN301
VANGUARDIA
Defensiva Activa
Tier 3
10/9/2024
34
Costo de Energía
1
Enfriamiento
El usuario concentra todas sus fuerzas en sus manos, buscando endurecer los músculos de las mismas como si fueran un bloque macizo y compacto, con el fin de trazar un impacto contra una ofensiva en su contra, buscando amortiguar todo el daño posible con ellas. Si se mitiga todo el daño de la ofensiva cuasara [Derribo] sobre el agresor siempre que fuera una ofensiva melee.
Defensa Pasiva + [RESx2,6] de Daño Mitigado


Cuando el marine terminó de dar vueltas sobre el agua y por fin había un espacio entre Gretta y él, esta pudo tener un respiro para pensar en sus compañeros y darse cuenta de que algo se movía por su derecha sobre los maderos del muelle. Miró y vio a su flamante Shiro montado sobre la espalda de un hombre que vestía ropas exóticas. Al lado del jinete y su montura, estaba también Qazan.

-Que es eso ¿ah? ¿No había caballo o qué? , yo quí he terminiado casi, id tesioro, ahora vemos. Dijo Gretta con un tono estoico; tenía varias heridas por el cuerpo, pero no eran del todo preocupantes.

Dicho eso, Gretta agarró a los dos marines inconscientes y se dirigió hacia el otro que faltaba, el cual parecía que veía aturdido la escena y se preguntaba que pasaba con su capitán. Gretta aprovechó la confusión para preparar el puño, lo cerró con fuerza y le soltó un puñetazo en el brazo donde portaba el arma, con la intención de rompérselo.

Impacto Directo
COM101
COMBATIENTE
Ofensiva Activa
Tier 1
3/9/2024
17
Costo de Energía
1
Enfriamiento
El usuario encarará de frente a su adversario propinándole un poderoso impacto directo con alguna de sus extremidades, aplicando un [Empuje] de 4 metros.
Golpe Basico + [FUEx2] de [Daño contundente]




Cosas y Números
#46
Shiro
Ninguno
El peliblanco soltó un fuerte suspiro en cuanto se posó encima del marine y notó que este caía bajo su control tras soltar una queja que no tardó en morir en su boca. Shiro no solo había ganado la pelea con este último movimiento, sino que también había conseguido una baza extra por si aún quedaba algún marine custodiando lo que venían a robar.

- ¿Estás bien? - preguntó a Qazan mientras se fijaba en sus brazos. El gyojin había parado a mano descubierta la ofensiva del marine y temía que su nakama se hubiera lesionado. - El cabronazo pega duro - prosiguió mientras le daba unas palmaditas en el pecho al marine. El hombre estaba completamente subyugado por los poderes del espadachín y podían hacer con él lo que quisieran durante un tiempo limitado.

- Vamos con Gretta, no vaya a estar cenando antes de tiempo - apremió al gyojin mientras ordenaba al marine a moverse hacia donde se encontraba la daimink.

Cuando la pareja llegó, aún quedaba un marine en pie, no obstante, tras ver a su capitán sumido en aquel extraño trance se distrajo, momento que Gretta aprovechó hábilmente para golpear. El joven peliblanco no pudo evitar preguntarse qué se sentiría al ser golpeado por una mole como aquella.

- Seguro que me destroza - pensó el muchacho definitivamente tras sopesarlo un momento.

Gretta les había apremiado a que fuesen a por el tesoro, pero como el barco estaba volcado por sus nakamas, Shiro poco podía hacer en la búsqueda. El haberse comido aquella fruta del diablo le había otorgado al joven un poder tan asombroso como el que estaba demostrando, pero el precio a pagar era más que conocido a lo largo de todos los mares. No podía nadar.

- Qazan, tú que puedes nadar, adéntrate en el navío a buscar el tesoro - apremió al gyojin mientras señalaba el barco dado la vuelta. - No sé durante cuanto tiempo podré mantener al marine bajo control, así que cuanto antes lo encontremos… antes nos vamos - continuó tras bajar la voz para que solo él pudiese escucharlo.

Mientras Shiro esperaba a que Qazan realizara su tarea, devolvió su atención hacia el combate. Dudaba de que el marine tuviese ganas de seguir luchando con la daimink dada la situación, pero como al peliblanco no le gustaba arriesgar se acercó a la acción sobre la grupa del capitán.

- Eh, tú - llamaría la atención del tipo, si es que seguía consciente. - Si no quieres ver cómo le rebano la cabeza a tu superior… ya puedes parar y contarme con pelos y señales que es lo que llevabais a bordo - amenazó Shiro mientras posaba el filo de la espada que aún empuñaba sobre el cuello del marine con cara de mono. - No quiero titubeos, solo información.

Energía y vida
#47
Qazan
Qazan
Mientras paraba la ofensiva del capitán pirata, nuestro cocinero consiguió el tiempo suficiente para poder usar sus asquerosos poderes del demonio. Por más vueltas que le daba para adivinar el truco no había manera de saber como diablos funcionaba su poder, sólo sabía que era capaz de pronto de invadir un cuerpo ajeno al suyo y manejarlo a su propia voluntad. Fue toda una sorpresa para mi ver como alguien tan estoico como ese Marine con tanta fuerza había caído en la trampa de Shiro. - Recuérdame no enfadarte, eso da miedo-. Le dije al Marine que ahora era mi compañero de piratería.

Con aquel peligro bajo control, fuimos a por Gretta que para mi sorpresa aún seguía dándose de leches con los Marines. Sin embargo justo antes de llegar hasta ella podíamos ver cómo tenía la situación totalmente controlada. - Voy a recuperar nuestra recompensa del fondo de la bahía-. Les dije a mis compañeros mientras agitaba los brazos para terminar de aliviar el entumecimiento que tenía luego de parar el escudazo con los brazos. Cogí carrerilla y de un salto me zambullí en el agua. Comencé a nadar observando en todo momento dónde estaba Gretta peleando y a la vez, seguía el rastro del navío Marine que había empezado a lanzar escombros al mar.

"Pues si que le hemos dado fuerte." Pensé mientras acortaba la distancia entre el barco y yo. Una vez pude tocar el casco del barco, realicé una voltereta para apoyar mis pies en el casco y propulsarme hacia el fondo. - Que asco de pescadores... Podrían al menos recoger la mierda que lanzan al mar-. Dije mientras observaba el fondo de la bahía del puerto repleto de mugre y suciedad que los humanos habían estado arrojando aquí durante años y años. Podía ver de todo, restos de redes de pesca, cadenas, sogas, algún que otro mueble... Daba asco nadar en aquellas aguas - Será mejor que saque el tesoro antes de que me den ganas de vomitar-. Dije mientras hacía un barrido buscando el tesoro. La verdad es que no tardé demasiado en dar con él, encontré un cofre que supuse era el tesoro, ya que apenas tenía marcas de corrosión por el agua salada.

- Tu te vienes con nosotros-. Comenté mientras agarraba el pesado cofre. Luego de asegurarme que lo tenía bien sujeto, di un salto desde el fondo del mar y luego seguí propulsándome nadando con mis piernas y mi cola. Teniendo a Gretta como referencia recordaba exactamente el lugar por donde me había zambullido al agua. - Por ahí-. Seguí nadando y propulsándome hasta que emergí del agua. - ¡¡Lo tenemos!!- Les dije a mis compañeros mientras sacaba el cofre y lo colocaba a los pies de Shiro para luego de un impulso con el muelle sacar el cuerpo del agua. - Veamos si ha valido la pena-. Dije mientras abría el pesado tesoro.
#48
Ray
Kuroi Ya
El marine es derribado al poder la daimink reaccionar a tiempo para interponer las palmas de sus manos ante su ataque. Su rostro refleja la sorpresa más absoluta al ver cómo su estocada no solo no logra atravesar las duras pezuñas de su enorme oponente, sino que rebota contra ellas, cayendo hacia atrás y aterrizando con su espalda sobre el suelo.

Los movimientos posteriores de la jabalí son lentos, pero dado que su oponente está en el suelo mientras intenta levantarse no es capaz de reaccionar a tiempo para evitar su acometida. Trata de defenderse con su arma, pero no es lo suficientemente rápido. El primer golpe le hace daño, pero no es nada comparado en el segundo. En el mismo instante del impacto directo siente cómo los huesos de su brazo se rompen con un fuerte chasquido, obligándole a soltar su arma. El dolor le atenaza, y no es capaz de soportarlo.

Para colmo poco después Shiro asomó su cabeza a la espalda del oficial y se dirigió a él, instándolo a no oponer más resistencia bajo amenaza. El hombre, entre el dolor y la confusión producida por ver a un pirata subido sobre la chepa de su superior y montándolo como si de un simple caballo se tratase. Por un momento da la sensación de que su cerebro cortocircuita, incapaz de asumir tan rápidamente todo aquello, pero unos segundos después logra recomponerse. Incapaz de condenar a la muerte a su superior, y sabiéndose imposibilitado para continuar luchando, no pone problema en acceder a la petición del corsario de cabellos plateados y os cuenta lo que sabe:

- Solo llevamos lo que incautamos del barco de los Piratas de Hargreaves. - Os dice. Su voz suena sincera, y puede notarse a la perfección la preocupación que siente por su superior y el miedo por su propia seguridad. - Unos nueve millones de berries en efectivo. ¡Lleváoslo si queréis, pero por favor soltad al Teniente!

En su rostro podéis ver la súplica, producto de la desesperación de saberse a vuestra merced. Es en ese momento cuando Qazan, que se había sumergido para buscar el tesoro, emerge de entre las aguas cargando un voluminoso cofre sobre sus hombros. El marine le mira y, con expresión temerosa al darse cuenta de que se ha quedado sin argumentos para negociar, os pide:

- ¡Ya tenéis lo que buscabais! Ahora, por favor, marchaos por donde habéis venido.

Números


Off
#49
Gretta
La Devoramundos
Gretta logró acertarle el combo de golpes al marine y tras el último se escuchó un "CRAC", lo que indicaba que el brazo del arma se había partido. Gretta sonrió; ahora el combate había acabado y la vida del marine quedaba en sus manos. Shiro aprovechó que controlaba al capitán para hacerle hablar al marine.

—¡Ya tenéis lo que buscabais! Ahora, por favor, marchaos por donde habéis venido. Dijo el marine, totalmente derrotado y asustado. 

-¿Porfavior? Ohhh, antes espadazo por espialda y ahora porfavior ¿eh? Que grasioso tipo, ¿ah? ¿Has escuchiado Shiro? Por favior, dice, OUNGH OUNGH. Dijo Gretta acercándose al marine. Lo agarró por los hombros con cada mano, apretándole el brazo roto y acercándoselo bien cerca a su cara. —¡Shiro, ahora no miries eh!— Le dijo Gretta a Shiro y se giró para que este no pudiese ver lo que iba a suceder, ya que parecían no gustarle ciertas manías de Gretta. —Tu marin, ¿vies esto? Yo no cerda, yo jabalí, ¿vies diferensia? Colmilios más grandes, bioca más grande ¿ah? Mira bien, eh, parra no olvidar. Dicho esto último, Gretta aprovechó y le arrancó la cabeza de un bocado al marine.

Terminó de tragar el cráneo y tiró el resto del cuerpo decapitado al agua. Se acercó a los otros dos cuerpos de marines que flotaban para ver si tenían vida; les puso un dedo en el cuello; sus corazones, aunque muy pausadamente, aún latían, pero seguían inconscientes. "Estos no me han llamado cerda, que el mar decida si viven" pensó Gretta y, tras un ligero impulso, los dejó flotando a la deriva.

Al momento emergió Qazan detrás suya con un tesoro: —¡¡Lo tenemos!! Veamos si ha valido la pena. Dijo el pescado entusiasmado. Gretta lo miró abrirlo y vio que tenía berries; ella no sabía contar, pero eso parecía mucho. —Bien ¿viamos? Llevo todo día fuera y tiengo hambre. Dijo Gretta, empezando a caminar a hurtadillas y con el refugio de la oscuridad por la costa para llegar a casa. Este lugar mañana sería un hervidero de marines.
#50


Salto de foro:


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